Bildia, digitalización para construir el mundo

Nos encontramos en el mejor momento para digitalizar el sector de la construcción.

En Bildia, Startup enfocada en transformar la cadena de suministro de las constructoras lo llamamos, digitalización para construir el mundo.

Hoy te traemos una interesante entrevista con Jerónimo Van Schendel, CEO de Bildia.

Este texto es más que una entrevista a un arquitecto, es un manual de instrucciones para constructoras que, en los próximos años, pretendan hacerse un hueco en su mercado y lograr sobrevivir a los retos de la construcción moderna.

El bagaje y la experiencia de Jerónimo es un estímulo para todos aquellos que han trabajado con él en diferentes partes del mundo y, sobre todo, para aquellos que formamos Bildia.

Su dedicación y afán por el negocio de la construcción puede resumirse en esta frase:

Un hogar es un sueño para quien lo habita, pero una gran responsabilidad para quien lo construye

Jerónimo Van Schendel

¿Cómo un arquitecto acaba creando un Saas para constructoras?

 

Vengo de una familia con raíces españolas y holandesas con una tradición constructora desde hace más de 100 años y que ha estado en conexión con algunas de las constructoras de más renombre de España.

La arquitectura, el diseño y la construcción han sido, desde pequeño, un referente que no sólo viví en mi círculo familiar, sino que me llamó la atención

Cuando estudiaba arquitectura, empecé a darme cuenta de que hay multitud de agentes que no están bien conectados y de que el sector podría trabajar de una forma más eficiente.

Al terminar, durante muchos años, seguí formándome, tanto en pequeñas empresas como en las más grandes, de obra pública y privada, en estudio y oficinas de obra y diseño.

De esta forma adquirí una visión holística del sector de la que nace Bildia.

Gané un premio nacional de Arquitectura y Construcción.

Trabajé en Cruz y Ortiz que, entre otros proyectos, han desarrollado el del Wanda Metropolitano.

Monté mi propia empresa de diseño y construcción donde aprendí, de primera mano, las dificultades de la gestión de construcción.

Siguiendo mi interés de crecer y conocer cómo se hacen las cosas en otros países, donde la construcción está más avanzada tuve la oportunidad de irme.

Tuve la oportunidad de irme a la Universidad de Harvard, donde Realice un Master en Innovación para la Arquitectura y la Construcción.

Conocí distintos modelos de otros países

En esta gestión de proyectos tenía que lidiar, diariamente, con todos los implicados en un proyecto grande de construcción (clientes, financieros, diseñadores o instituciones) pero también con todo el ecosistema de proveedores.

Tratar con proveedores es bastante complejo porque hay mucha desconexión entre lo que necesitan, buscan y ofrecen los proveedores y lo que tú necesitas cuando estás dirigiendo una obra.

Hasta que llegó un momento en que identifiqué que había una oportunidad de optimizar procesos y eso fue lo que me llevó a tomar la decisión de crear Bildia.

 

¿Cómo nació Bildia?

Bildia surgió de un encuentro en un parque a la salida de la Universidad de Columbia

Nos sentamos a explorar las posibilidades y cómo podríamos ayudar a empresas constructoras como la tuya.

Debatiendo con quien hoy son cofundadores de Bildia, quien también son arquitectos y constructores que vienen del sector del ámbito industrial , aeronáutico y constructivo,

Nos dimos cuenta que , tanto yo, en la gestión de obras internacionales, como ellos en su gestión de proyectos de la talla de Airbus y otras empresas de esta envergadura, identificábamos que los procesos de estudios, contratación y compraventa de productos, sistemas y servicios para la construcción son un desastre.

Estos procesos están muy poco digitalizados y se podrían realizar de una forma más eficiente si lo que buscas en tu empresa es eficiencia, velocidad y altos estándares de calidad.

Bildia nace durante la pandemia.

Desarrollamos un software de estudios y compras para la construcción que ha obtenido muchos de los mayores reconocimientos para startups en fases tempranas.

Conseguimos premios por la Politécnica de Madrid por el potencial de nuestro modelo de negocio.

Fuimos nombradas por State Innovation una de las 3 empresas más innovadoras de España y finalmente por la Revista El Referente una de las 100 startups más innovadoras de España.

El resultado ha sido poner al servicio de constructoras y promotoras un compendio de más de 35 años de experiencia, de lugares vividos, de proyectos gestionados en más de 30 paises, premios internacionales en licitaciones y concursos de construcción y arquitectura, así como muchos reconocimientos en materia de innovación.

Para este desafío que nos hemos marcado:

• Cambiar el día a día de constructores y promotores.

• Mejorar la rentabilidad de las obras y la productividad de los equipos de trabajo en las constructoras.

• Aportar la mejor trazabilidad y el control total de los gastos y contrataciones en cada proyecto constructivo

¿Cual es el principal reto al que se enfrentan las constructoras en esta era digital?

El principal reto es cultural. Es creer en un cambio que ya está aquí.

Con la digitalización pasa como con el ejercicio a nivel personal: el primer día da pereza y es más complicado, pero una vez que te pones, tu día a día es mucho mejor.

No te cuesta esfuerzo entrenar y pasadas unas semanas no entiendes cómo pudiste vivir sin ello.

Las empresas de nuestro sector deben convencerse a sí mismas y a sus equipos de que el trabajo analógico sencillamente ya no es viable, de la misma forma que dibujar plantas a mano dejó de serlo en un momento ya lejano de la historia de nuestra industria, por multitud de razones.

La falta de digitalización se ha convertido en un riesgo de tendencia creciente, para la competitividad de las empresas dentro y fuera de España.

Esto afecta particularmente a las PYMES, que han venido invirtiendo menos en estas áreas y que tienen menos herramientas y músculo financiero para competir.

No se trata de hacer una o dos acciones superficiales para que parezca que somos digitales. Se trata de adoptar la digitalización como cultura, como ADN y como forma de ser más eficientes a todos los niveles.

Esto es esencial para competir con el de al lado, para conocer mejor tu negocio, para que tus empleados trabajen más a gusto y para ofrecer un mejor servicio: los clientes, los inversores, las instituciones y los gobiernos lo saben y por ello cada vez se demandan resultados que sólo pueden obtenerse con digitalización, por ejemplo a nivel de trazabilidad, de transparencia, etc.

Volviendo a mi analogía inicial, si quieres ponerte a hacer ejercicio, debes empezar por el principio.

En Bildia trabajamos en digitalización de la cadena de suministro, que es un área crítica y esencial para el negocio de la construcción, y por cierto, también un elemento clave en su sostenibilidad.

Nuestra visión, respecto al tema cultural, es ser como el entrenador físico:  transformar algo complicado en algo sencillo interesante y rápido de implementar para las empresas, a través de un producto muy intuitivo pero potente, que hace exactamente lo que promete que hace.

La digitalización no tiene por qué ser compleja, sino algo que a priori te aporte beneficios casi inmediatos, y creo, que ahí también está la responsabilidad de las empresas de tecnología para nuestro sector.

Bildia, por ejemplo, se puede implementar completamente entre uno y tres días, y permite a los equipos de estudios, compras y jefes de obra aprender, de manera interactiva y sencilla, a medida que usan la solución.

Eso, sin perjuicio de que el servicio al cliente sea nuestra primera prioridad. De nuevo somos como el entrenador, que no se pone a hacer los abdominales por ti, pero está ahí para cualquier cosa que necesites.

¿Por qué es tan importante la cadena de suministro en la construcción y su eficiencia?

El sector de la construcción está cambiando, y puede que en 15 o 20 años hablemos de una mayoría de obra industrializada en el mercado, pero incluso en ése escenario, la construcción es y será siempre una industria muy diferente a las demás.

Fundamentalmente porque los edificios, infraestructuras y espacios urbanos que construimos SIEMPRE deberán adaptarse a su entorno para poder existir.

Esto es a la vez lo que lo hace tan apasionante.

Un coche es exactamente igual al anterior en la cadena de producción, y eso facilita muchas cosas. Sin embargo, un edificio al final es un prototipo -más o menos industrializado- que se monta en un determinado solar, y para el que hay que coordinar un ecosistema gigantesco de recursos en forma de materiales, servicios y sistemas que coexisten.

El éxito es que salgan tan bien, una y otra vez ¡Imagínate el caos que sería si para cada coche que se produjese, hubiera que cuantificar, dimensionar y encontrar al proveedor adecuado para cada componente!

Todavía iríamos a caballo a todas partes, exagerando un poco. Pues en la construcción, eso es exactamente lo que ocurre con cada edificio, en mayor o menor medida.

Esa complejidad hace que la cadena de suministro requiera una gran dedicación de tiempo y conocimiento por parte de las empresas constructoras, con los recursos que ello implica.

Hay que coordinar a multitud de actores, en múltiples canales y con infinidad de documentos asociados, normalmente con procesos muy poco eficientes y repetitivos.

Por otro lado, en una obra tipo, más del 50% del coste total (como mínimo) está directamente ligado a compras y contrataciones, de manera que la cadena de suministro representa la mayor partida de gasto junto con la de personal, probablemente.

Y finalmente, en el modelo de negocio de las constructoras, tomar las decisiones adecuadas a la hora de estimar, ofertar, comprar y/o contratar es esencial para el beneficio económico de cada trabajo.

De hecho, la Asociación Española de Responsables de Compras AERCE estima que un 1% de incremento en la eficiencia de las compras, puede tener un impacto de hasta un 10% en el beneficio neto de una empresa constructora media, debido al gran impacto de éste área en el negocio global.

Por lo tanto, en lo que respecta a la cadena de suministro, es esencial optimizar, automatizar las tareas repetitivas, centralizar los canales para tener la mejor y más reciente información y tomar decisiones ágiles.

Así, los equipos de estudios, compras y licitaciones también pueden dedicar todo su conocimiento a los aspectos analíticos, a negociar, a definir mejor las necesidades a sus proveedores en favor de una colaboración más óptima.

También podrían dedicar el tiempo a hacer otras tareas de aporte de valor para su empresa, en lugar de estar repitiendo tareas como perseguir a proveedores para que les oferten, recordarles fechas límite, enviar el mismo correo 100 veces a distintos proveedores en busca de una solución, o dedicar horas y horas a archivar documentación y a organizar los datos de todas sus operaciones y conversaciones.

Todo esto puede hacerse de manera muy rápida, segura y sencilla a través de la digitalización, y de Bildia, más concretamente.

El sector de la construcción no es un sector fácil de transformar, ¿verdad?

Somos conscientes de la dificultad del sector y del proyecto y de que no debemos hacerlo solos.

Por ese motivo nos hemos rodeado de los mejores.

No sólo hemos conformado un gran equipo sino que estamos acompañados por los mejores Advisors con más experiencia en el sector, profesionales que han liderado algunas de las mejores constructoras y promotoras de España a nivel de innovación y que al tiempo son inversores del sector en España.

Nuestro equipo, además, está seleccionado con el objetivo de transformar la eficiencia en nuestro sector, profesionales comprometidos con esta única visión de transformar las constructoras, que ganen más dinero y sobre todo, que aprendan con cada obra.

Qué aporta la digitalización a un sector acostumbrado a tareas analógicas?

La digitalización es, sencillamente, un paso de gigante, de la noche al día en multitud de procesos, que beneficia a las empresas de todos los sectores de formas genéricas y específicas a la vez.

Por ejemplo a nivel general, la digitalización ayuda entre otras muchas cosas a mejorar o eliminar procesos administrativos, como procesar facturas, tanto a empresas del sector farmacéutico como de la construcción.

Para eso y otros procesos genéricos hay distintos ERPs que hacen su función, y han estado ahí desde hace décadas.

Pero la digitalización también, y sobre todo hoy en día, aporta valor a cada sector de una forma diferenciada y específica, a través de softwares y aplicaciones que permiten que se hagan las labores o se tomen las decisiones características de cada sector de una forma mucho mejor.

El CAD o el BIM son un ejemplo de digitalización específica para la construcción, la ingeniería y el diseño, pero también lo son otros muchos softwares en la nube que aportan infinidad de valor en distintos ámbitos de la construcción.

Por ejemplo, Bildia, se centra en automatizar y acelerar el trabajo, así como centralizar la información y aportar trazabilidad total a la cadena de suministro, concretamente para los departamentos de estudios y licitaciones, compras y a los jefes de obra.

Otro de los temas culturales de la digitalización, que en mi opinión retrasa mucho a nuestro sector a nivel internacional y también en comparación con otros sectores, es que la gente piensa que un mismo vestido les vale para todo. “Oiga el smoking vale para ir a una recepción o a una fiesta, y para la obra hay otro atuendo, ¿no?”

Con la digitalización es igual. ¿Nos imaginamos a alguien en una obra con chanclas? Lógicamente no. No sería ni eficiente ni sensato, y por lo tanto llevamos botas para proteger los pies, chaleco para que nos vean mejor, arnés si procede para evitar las caídas, etc.

El CAD o los ERPs son digitalización, pero sirven para lo que sirven, y tienen muchas carencias.

Si cada empresa hiciese el sencillo ejercicio de analizar sus tareas clave y pensar en qué cosas debería llevar un “traje digital” para ayudarse a sí misma, estaríamos mucho más avanzados.

Lo que nos gusta en Bildia es que la cadena de suministro, que nosotros digitalizamos, es como las botas de la obra. Es decir, una parte esencial casi, (y creo que podría quitar ese casi) para cualquier constructora.

El retorno de la inversión de cada uno de estos softwares es muy rápido y claro si se hace el ejercicio de pensar si afecta a una tarea que nosotros hacemos relativamente a menudo o no.

En el caso de Bildia por ejemplo, mejoramos los estudios, compras y licitaciones. Toda empresa de software que se precie debería ser capaz de presentarle de forma clara a su cliente la relación entre el valor que aporta, y la inversión que supone. Y naturalmente le ratio es muy interesante para el cliente.

¿Qué importancia tiene la comunicación en los proyectos de construcción?

He gestionado proyectos en China con todos los recursos más avanzados que puedas imaginar, y en costa rica de los menos avanzados, pero en todos los lugares he aprendido que lo que mas se valora es la colaboración.

Adelantarse a los acontecimientos, tener una trazabilidad , un orden y saber lo que se necesita en un proyecto es fundamental.

Los suizos dicen: invierte más tiempo en planificar y comunicar e invierte menos tiempo en construir. (60/40) Japon o China

El ideal de colaboración cambia radicalmente el éxito de los proyectos y el éxito de las empresas

Y Bildia no es otra cosa que un ideal de comunicación utilizando las herramientas digitales

La idea de Bildia va más allá de un negocio, ¿verdad?

 

Desde que me formé he tenido siempre la obsesión de hacer algo por el mundo.

Devolver al mundo todo lo que he tenido gracias a mi esfuerzo y mis posibilidades.

Soy de los que piensan que cuanto más recibes, más debes devolver.

Transmitir todo lo que he aprendido en forma de soluciones a problemas actuales de las empresas constructoras motiva mi día a día.

Y en Bildia damos forma a la certeza, que comparte todo el equipo, de que hay mucho trabajo por hacer, un sector que transformar, y para ello hemos diseñado un software en la nube muy potente y, a la vez, sencillo de utilizar.

¿Cómo ayuda Bildia a las constructoras?

En Bildia ayudamos a empresas constructoras a ahorrar mucho tiempo y dinero, además de conseguir un 100% de trazabilidad en sus procesos de licitaciones, con un software en la nube sencillo y fácil de utilizar.

Hemos estudiado, en diferentes países, que este tipo de soluciones repercuten, directamente, en los resultados y en la rentabilidad de las constructoras.

Automatizar el grueso de tareas de la cadena de suministro de una empresa constructora, aporta control total e inteligencia de negocio y distingue a nuestros clientes en su mercado haciéndolos realmente competitivos.

Hasta aquí la entrevista a Jerónimo Van Schendel, si quieres calcular cuánto puedes ahorrarte digitalizando tus departamentos de estudios y compras a continuación tienes el accesos a nuestro simulador de ahorro.